jueves, 29 de noviembre de 2012

El abogado Mariano... Mario Jiménez contraataca y cimbra a la Procuraduría



Y dijo el mandatario: si no pueden con las averiguaciones, recuerden que yo soy abogado, pero Alicia le exigió su cédula profesional.

Arturo Tecuatl

El magistrado Mario Jiménez la emprendió ahora contra el Ministerio Público, a cuyos responsables acusó de fabricar pruebas en contra del presunto proxeneta, Valentín Rojas Rojas. Este fue liberado tras un año en la cárcel al desvanecerse las pruebas aportadas por la Procuraduría de Justicia de Tlaxcala.

En el fondo, las acusaciones se dirigen al gobernador Mariano González y a su abogada de cabecera (hoy titular de la PGJET) Alicia Fragoso Sánchez. El primero exigió a los diputados locales buscar los mecanismos para llevar a los magristrados Jiménez y Francisco Flores Olayo, a un juicio político por lo que el mandatario estatal consideró una actuación alentadora de la trata de personas.

¿Por qué este reclamo no contó con el concurso de Flores Olayo?

En una entrega anterior tratamos de ir al fondo de la malquerencia de González Zarur sobre dicho magistrado. Hace años, Flores Olayo habría cobrado cientos de miles de pesos al ex gobernador Tulio Hernández Gómez, inmiscuido en un delicado escándalo suscitado en una finca de su propiedad, para no detenerlo como responsable solidario de aquél delito, ya que su hijo Fluvio, fue en quien recaería la responsabilidad.

Supongo que por ese motivo, Flores Olayo antepuso un bajo perfil al castigo del muy molesto Mariano González, quien vería en la inquietante liberación de Rojas Rojas (el supuesto proxeneta) la oportunidad de oro para que el mencionado jurista vomitase el dinero arrancado, según una buena fuente, al desventurado ex gobernador priísta de Tlaxcala.

La embestida del mandatario provocó daños colaterales. Si existía un pendiente con Flores Olayo, ahí Jiménez nada tenía que ver. Y sobrevino la reacción del magistrado, presidente de la Sala Penal del Tribunal Superior de Justicia. Un destacado miembro del Poder Judicial reclamando al ejecutivo local, lanzar acusaciones infundadas respecto a su comportamiento en un tema inherente solo al Judicial.

Es interesante dar continuidad al contexto de este lío recién desempacado por el mandatario estatal.

El pasado fin de semana creció en la Procuraduría el rumor de que la titular, Alicia Fragoso Sánchez, había solicitado licencia al cargo.

El dato no era erróneo pues al parecer Fragoso Sánchez, evaluó si seguía al frente de la institución o la mandaba al diablo después de lo que aconteció, y que aquí trataré de resumir:

1.- Muy molesto por el debilitamiento de su petición de juicio político a los magistrados aludidos, el ejecutivo estatal reclamaría airadamente a Fragoso la incompetencia de los Ministerios Públicos a su cargo.

2.- Dicho reclamo-regaño-maltrato, se haría acompañar de los tradicionales jalones y otras suertes de violencia, nada más y nada menos que sobre la persona de la titular del la PGJET, sostiene este rumor.

3.- Entonces se daría un intercambio de palabras; más bien de gritos, pues la abogada reclamaría a quien considera su superior por tanta presión, pese a los sueldos de miseria que perciben los ministerios públicos.

Lo que siguió fue para labrarlo en material perenne. "Dígame si no pueden con la integración de las averiguaciones, recuerde que yo soy abogado, y si no tienen la capacidad, pues entro al quite", advierto, se trata de una recreación de las versiones, abundantes pero coincidentes surgidas en la Procuraduría.

-Pero, señor gobernador -respondería la aludida- para eso se necesita contar con cédula profesional, plantearía.

Sobrevino más violencia verbal. Creo que no podía ser de otra manera pues un tema no menos candente amenazaba con salir a la luz: la ausencia de título y por consecuencia de cédula profesional.

Aun peor, ahora el de los gritos alardeaba con ser un experto en Derecho, sin duda una de las razones de peso para que los tlaxcaltecas le tengan tanta desconfianza, según la más reciente encuesta del Gabinete de Comunicación Estratégica, que lo califica con 16.8, el indicativo más bajo asignado a un gobernador del país.

Un mandatario que a estas alturas pretende ser abogado y una procuradora bajo presión, son la contraparte de Mario Jiménez, el magistrado que hoy ha iniciado la contrademanda en medios, y con facilidades mil para  el desquite del poder al que pertenece, cuyo presidente Justino Hernández, ha preferido nadar de muertito en este embrollo. Debe tener razones de peso para hacerse de la vista gorda ante injerencia del ejecutivo en sus terrenos.

Otra enseñanza es que la explosividad del mandatario requiere subordinados a prueba de humillaciones, con una piel tan gruesa que soporten los arranques psicóticos del personaje al cual, pasada la crisis, invade un terrible sentimiento de culpa, mas los daños ocasionados son irreversibles.

lunes, 26 de noviembre de 2012

Beatricistas en la orfandad


Tras la partida de Paredes a Brasil hay una gran historia, llena de pasión y poder, que se topó con un grueso muro ante los tecnócratas, de regreso a imponer su estilo.

Arturo Tecuatl

Es casi un hecho que la paisana Beatriz Paredes Rangel, sea nombrada como Embajadora del Servicio Exterior Mexicano. Según lo expresado por ella misma, es Brasil el destino que le aguarda, con el importante foro apropiado para una diplomática de su nivel.

No cabe en México. Ocasiona prurito al clan Salinas, patrocinador de Peña. Digamos que su antagonismo a la tecnocracia salinista ya la había forzado a dejar territorio mexicano. En 1993 Salinas la envió como embajadora a La Habana, tal vez a purgar una condena, no tan larga, poco más de un año, luego del polémico papel jugado en la salida de Cuauhtémoc Cárdenas y Porfirio Muñoz Ledo, de ese partido, allá por 1988.

Se suponía que el rompimiento con el PRI incluiría originalmente a los tres. Es más, fue Beatriz factor de peso para que Cárdenas tomase tan grave decisión. Sin embargo guardó silencio, se quedó en el PRI y tuvo que ser muda testigo de la consolidación cardenista, lo mismo al ganar el gobierno de Michoacán que, años más tarde, al ser el primer gobernante electo de la Ciudad de México.

Con el tiempo veríamos las verdaderas intenciones de Beatriz: ser la candidata del tricolor a la Presidencia. Pero por más altura ganada con su cuidadosa actuación como dirigente de su partido y miembro alternado de ámbas cámaras, de senadores y diputados, fue incapaz de disipar el recelo de una cúpula tricolor determinada a impedirle el juego.

La figura de Enrique Peña Nieto, vacía de la cabeza pero con una disciplina sobresaliente era lo que demandaba la nueva conferencia, entre salinista y zedillista, como verán ustedes miembros distinguidos de la tecnocracia, uno de cuyos objetivos sería bloquear todos los caminos a la paisana, enérgica representante del echeverrismo, cuya mano se posó años ha, en aquella activista izquierdosa y consentida de otro caso extraordinario del PRI: Emilio Sánchez Piedras, reacio al autoritarismo de su partido, y por lo tanto enviado a la congeladora a causa de ejercer su legítimo derecho a disentir.

Hombre, pero eran tiempos de la temida locomotora priísta. Nadie en su sano juicio podía desincronizarse de la rígida línea.

Cuando Beatriz hubo de romper con la fantasía, su mundo se derrumbó. Peña no solo era el agradable rostro, sino la facia del tren con la memoria de elefante de Manlio Fabio Beltrones y la graciosa maldad de Emilio Gamboa, con la incontrolada testosterona de Murillo Karam y los ojos de capulín envenenado de Luis Videgaray, el inevitable super secretario de Gobernación, con todo el poder que es capaz de concentrar un PRI contrariado por soportar doce años fuera de la nómina presidencial.

Y si afirmo que el mundo de aquella se vino abajo no exagero.

Pero no la entiendo. Había demasiados atrevimientos de pormedio. Que no me diga que su memoria borró el último lapso de su gobierno en Tlaxcala, cuando el timorato y desesperado José Antonio Álvarez Lima, hubo de suplicar al presidente Salinas la remoción de aquella, para llegar sin sobresaltos a la administración que, si algo valioso dejó fue el nombre de Verónica Rascón.

Se percibe. Al nuevo PRI le agradan las mujeres como Angélica Rivera, lindas, obedientes y muy discretas. A ella todo se le perdona porque al igual que su esposo es consciente de la progresión con la que debe llevar sus reflexiones.

Si el PRI combatió por todos los medios la llegada del profeta Andrés Manuel López Obrador, acaso permitiría que alguien de casa, con un expediente de lo atrevido a lo imperdonable, encabezase el proyecto con el cual, reinicia un largo período en el poder.

La pregunta consecuente es, ¿qué va a ser de los beatricistas en Tlaxcala?

Han quedado huérfanos.

Y las alternativas frente a ellos y ellas los obligan a fajarse pantalones y naguas.

Pueden hacerse de su partido y empezar de cero, considerando al culto presidencialista como una mera referencia.

También pueden enlistarse en las sorprendentes alianzas como la planteada por un PAN, víctima del tremendo pragmatismo de última generación.

O tal vez, volver a sonreir con Héctor Ortiz y Alfonso Sánchez Anaya, dispuestos ambos a actual al alimón, con tal de sobreponerse a las temibles embestidas de Mariano González Zarur, hoy por hoy, el mandatario sin rumbo con sede en Tlaxcala.

lunes, 19 de noviembre de 2012

La verdad tras el odio marianista a los liberadores de un proxeneta

¿Cómo hacer, Dios mío, para que esos magistrados dejen de hacer añicos la fatídica integración de averiguaciones previas en la Procuraduría de Alicia Fragoso?

Arturo Tecuatl

Cuánta frustración para todos, comenzando por el gobernador Mariano González Zarur, cuya administración  intenta detener la trata de personas. Y aquí viene la duda. ¿De veras Mario Jiménez y Flores Olayo, actuaron de mala fe , ¿fueron capaces de liberar a un proxeneta confeso y sentenciado porque las denuncias  integradas en la Procuraduría fueron deficientes?, ¿recibieron una gratificación por reprobar el trabajo de la procuradora?

El odio de Mariano -porque no es otro sentimiento- contra Flores Olayo, se remonta a aquél episodio en el cual dicho abogado, entonces en el papel de ministerio público, arrancó presuntamente varios cientos de miles de pesos al ex gobernador Tulio Hernández, al verse involuntariamente inmiscuido en un escándalo, con grave responsabilidad para uno de sus hijos, Fluvio de nombre, ausente desde aquella trágica experiencia, cuando ministeriales y criminales protagonizaron una terrible balacera, en una finca propiedad del ex marido de Silvia Pinal.

Indignado por la evidente extorsión a su amigo, el icónico priísta, el entonces líder estatal del PRI sentenció a Flores Olayo, "a vomitar esos dineros", según se lo comentó a la entonces abogada suya de cabecera y hoy, aparente cebo con su deficiente integración de denuncias, para que esos magistrados cayeran en la trampa.

O tal vez las condiciones se dan de forma inmejorable.

Lo cierto es que el gobernador González Zarur, instruirá a sus diputados para llevar a juicio político a esos dos, condenados, uno a vomitar la centaviza de Tulio y el otro, a pagar las consecuencias de su ladino y convenenciero uso del Derecho para librar a un padrote de las rejas, ¿a cambio de qué, o de cuanto?

Ahí los tiene. Dos jueces de pedigrí que representan un frente más para el gobernador, quien no dejaría ir la oportunidad de aplicar el vomitivo ya sabe usted a quién, y de paso exhibir al otro, con un expediente poco admirable, a lo mejor despreciable.

Sentencia del TRIFE contra la emisora apizaquense

¿Recuerda usted el cargadísimo comportamiento de la emisora radial de Apizaco, a favor de la candidata del PRI a diputada federal, Guadalupe Sánchez Santiago?

Las pruebas entregadas al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) por Humberto Alba Lagunas, entonces abanderado panista al mismo puesto, cumplieron su objetivo y obligan al Instituto Federal Electoral (IFE) a analizar a profundidad la reparación del grave daño hecho por los responsables de dicha radiodifusora a la democracia tlaxcalteca.

Era gorsera la cerrazón de los empleados hacia candidatos de otros partidos. Víctor Briones Loranca, el candidato perredista en aquella contienda pueda dar cuenta de ello.

Hoy,  estamos en la víspera de una acción inédita de la máxima autoridad electoral que, podría llegar al extremo de anular la diputación que ostenta la mismísima hija del ex gobernador Emilio Sánchez Piedras y que, según lo podemos juzgar, combinó la estrategia del ex gobernador Alfonso Sánchez Anaya, para impedir a toda costa el triunfo de Briones Loranca -arriba en las encuestas- pero respaldado por su enemiga la ex senadora Minerva Hernández Ramos.

Anuncian cisma laboral en la Función Pública

Tras el desmantelamiento del C4 y un brutal recorte en la nómina de la Secretaría de Salud, está en puerta el más cruel despido masivo en la Secretaría de la Función Pública.

Lo interesante es ver cómo se habría urdido el reclamo laboral en tribunales bajo la asesoría encabezada por  el hermano de quien cobró celebridad en su chamba de supervisor de funcionarios.

Y más interesante aún, que ese intento quede frustrado porque, verán ustedes, cierto desencuentro entre el gobernador Mariano y el patrocinador de dicho secretario de gabinete, ocasionarían el truene de aquél, sin más explicación que, "vete, nunca me hiciste falta".

arturotecuatl@tlaxcala-online.com

viernes, 16 de noviembre de 2012

De regreso a la miseria: despidos, pésima administración, ¿en manos de quién estamos?

Ya no hay luchadoras como Natalia Teniza, su heredera Rosalía se volvió tan rica como los terratenientes a los que combatía.

Arturo Tecuatl

Qué tiempos aquellos, verdad, cuando el director de Tránsito hacía favores personales a sus cuates, y también la hacía de chofer del gobernador en turno, y este nada más necesitaba de su tesorero y un secretario para llevar las riendas del estado.

Lo podemos constatar en esta bella imagen de la década de 1930. Sobraba espacio y faltaba gente. ¿Quién diría que al paso de los años la entidad iba a crecer tanto, a más de un millón de habitantes, una locura para esos tiempos.

Hoy, en pleno siglo XXI la consigna alienta lo retro. Vaciar las oficinas, concentrar las responsabilidades en una sola voluntad, todopoderosa, sin cuyo consentimiento ningún programa es y ninguna gente puede, por calificada que sea.

Regresar a los tiempos de la simpleza, pero con más de un millón de habitantes.

Eso es una locura. Nada más una mente torcida o de mala voluntad lo podría entender de ese modo. Cientos de miles de causantes también son clientes de los negocios del Estado. Necesitan quien cuente y guarde el dinero de sus contribuciones. Quieren buena policía, mejores calles, condiciones que alienten la riqueza.

Pero se topan con una visión retrógrada. Con la añoranza como causa y la miseria como herramienta, y sin haberlo pensado alguna ocasión asumen el rol del ama de casa encerrada, limitada, amenazada y obligada a no expresar queja alguna porque han tenido que zurcir diez veces la misma prenda nada más para dejar satisfecho a su cónyuge verdugo.

Contraer al aparato burocrático bajo justificaciones de austeridad agobiante pensando que el estado se puede seguir gobernando con saliva y pulque, es una sonora arbitrariedad que despoja a muchos de la pequeña parte del pastel a la cual tiene derecho.

Aun peor, dejar a muchos sin comer para dar demasiado a pocos muestra el proyecto original de esa oligarquía constituida por un puñado de terratenientes que, sin rubor despojaron de sus tierras a los indios y luego, los aceptaron como esclavos en las áreas otrora dominadas por ellos.

De no haber sido por el activismo rebelde de personajes como Natalia Teniza, el gusto de los terratenientes a costillas de sus acasillados no habría conocido límite.

Así comenzó la disputa por la tierra.

Y la camada de activistas siguió. Llegó Rosalía Peredo Aguilar y algo logró. Pero lo pasó lo que al Partido Comunista de la ex Unión Soviética: engordó, enriqueció y de luchadora social pasó a tipa rica y poderosa, igual a los que combatió en algún momento de su vida.

Su ausencia se siente.

Hoy, los despidos masivos son la factura que un representante de los terratenientes presenta al estado, con intereses sobre intereses, y hasta con el gozo de ver en la miseria a miles de familias que, para él, nunca debieron dejar de ser esclavos.

Esas familias tuvieron la oportunidad de la preparación.

Y sus hijos se hicieron profesionistas, capaces e inteligentes. Y no vendieron su dignidad a los terratenientes hacendados. Pero han sido debilitados, desplazados, bajo la ira justificada de un plan de austeridad. ¿Para qué? Los ahorros, o supuestos ahorros por tantos despidos, no han hecho mejor al estado. Han hecho torpes a las dependencias, escasos a los policías, agresivos a los uniformados en la élite trepada en helicópteros, apuntando con armas amenazantes a quien se le ocurra que puede ser una amenaza para el buen desempeño del estado y su extraordinario gobierno.

La historia quedó trunca. Dejó de haber contrapesos. A los diputados los compraron. Y ellos, testigos de la crisis en puerta, se vendieron. Se acostumbraron a la buena vida. Los magistrados se pusieron de parte de los adinerados y, hasta liberan a proxenetas confesos en plena lucha nacional contra la trata de personas, argumentando deficiencias del ministerio público en la conformación de las averiguaciones previas.

El gobierno es joven. No son yerros los que comete, es la venganza por haber quitado infinidad de hectáreas a los terratenientes hacendados. Y como las luchadoras sociales ruedan de panzonas, quedamos al desamparo, del crimen organizado, de los criminales que laboran en el Tribunal, que engordan como cerdos en el Congreso, que se burlan desde sus trincheras en el ejecutivo.

Eso está quedando de mi estado tras aquella decisión de 2010.

El otro factor de equilibrio, Beatriz Paredes, tuvo su premio de consolación tras perder la oportunidad de ser candidata. Y nos deja. Se va a Brasil como embajadora.

Quedamos en pésimas manos.

jueves, 15 de noviembre de 2012

Este p.. lo dejo a la hora que quiera



Uta, la pedita más reciente estuvo perra.

El shagui se nos puso grave. No se le sentía el pulso. Y si no ha sido porque, varil... lo empinamos para guacarear, yo creo que se muere el cabrón, pinche color que agarró, como de zombi. Lo más ojete fue que el viejo de la tienda nomás nos vio con nuestro desmadre en la banqueta y que llama a los tiras. Así, todo jodido nos lo llevamos. Pobre buey, nomás iba arrastrando las patas. Uta y en la esquina estaba su jefe, bien pedo también. Yo creo que nos olió porque medio volteó, medio nos vio, y que se pela.

Mi primo el Dany quería que lo lleváramos quesque a ponerle suero. Pero, ps no teníamos varo. Los últimos diez pesos los compramos de cigarros. Y a penas llevábamos dos caguamones por cabeza. Lo que pasa es que el pinche shagui no puede dejar el cemento. Se eleva gacho y siempre acaba cagado cuando chupamos. Neta como que da asco cuando se pone grave. Se pone romántico, llora un chingo y me caga que comienza a echarle la culpa a su jefa... que si es muy puta... que si hace buey a su jefe. Eso está jodido, tal para cual los dos bien pedotes también. Y pos neta, cómo se había de poner si llega a su casa y las madrizas al día. Si no le toca a él, le toca a su jefa y si no a sus carnalitos.

O sea, la neta chupar unas chelitas, vaya hasta rolar un toquesín estaba chido. Ya alivianados cada quien pa su casa. Así, sin hacer feo hasta podíamos asaltar a algún bato o chingarnos un estéreo. Pero hay que estar a las vergas, porque llegan los polis y ya valió madre. Hay que correr, esconderse o si el pedo está muy del cabrón, pos darse en la madre hasta con los pinches policías, hijos de la chingada en un chile a chile no la arman. Pero pos el pinche shagui valió madres, y ni modo de dejarlo ahí tirado, capaz que hasta se lo cogen.

Nos metimos en el lote baldío. Entre mierda y basura ahí nos tienes, cuidando al buey este. Eso sí, ni las caguamas se rompieron ni los cigarros se perdieron. -Da las tres carnal. -¿Un sorbito? -De lujo. -Mira, pinche chamaco ya se mueve. Bendito sea Dios. Neta, creí que lo íbamos a dejar por muerto. Se puso feo. Ya hasta quiero dejar de chupar. -Cálmate, mamador jajajajaja. -O, pos entonce chingas a tu madre buey, así está de la verga. Y luego pinches maestros dejan un madral de tarea. Ni como remediarse a la hora que se pone perro el viejo, pos neta qué vas a estudiar si a duras penas puedes sobrevivir en este desmadre.

Órale pinche shagui hijo de tu puta madre que pinche sustote nos metiste buey... no mames, jajaja, creíamos que ya estabas difunto puto. Ya no mames, deja el puto cemento, me cai que vales madre. -Ay cabrón, ¿qué pasó putos', ¿dónde estamos?, ¿qué pedo con mi cambio de a cien, pinche viejo de la tienda se lo chingó? -No mames puto, te íbamos a llevar al centro de salud para que te pusieran suero, hiciste re feo. Neta parecías un muerto. -Puta, que pinche frío, no mamen, da las tres, bbbb, puta dolor de cabeza vale verga...

-Pinche shagui y si preguntamos qué pedo con los orates de doble a, a mi carnala le quitaron lo puta briaga facilota y ora por lo menos se dedica a su chavita. -No mames, ¿pos qué crees que soy un pinche borracho tirado a la chingada, que me quedo tirado en las banquetas, o que soy un pata gorda hijo de su puta madre como tu tío el negro? Nel, a la hora que quiera dejo este desmadre, lo que pasa es que no desayuno desde antier, neta ando bien madreado, por eso a la hora de las caguamas me doblé.

-Nel buey, venías bien elevadote, pinches ojos vidriosos que ni te diste cuenta que te cagaste. -No chingues... uta, deveras, valió madre, ¡uta, no, pinches mamadas y ora qué voy a hacer cabrón! -Pos te digo, buey, te pierdes con esa mierda y ya ni un traguito en buen plan. Neta estás valiendo verga.

-Mira puto, no puedes ni caminar. Jajajajaja, de veras ya bailaste las calmadas. -Chinguen a su madre, no me cai que ora si no se como voy a llegar. Vamos a la gasolinera para que me lave las nalgas no sean cabrones.

- Oye puto. -Qué pedo. -Ya viste lo del trabajo por equipo, se supone que a eso salimos. -¿El trabajo de qué?, no mames buey, si a penas puedo caminar, cómo crees que voy a hacer un puto trabajo...

- Estaba pensando, tú todavía no tienes doce años. El Toño y yo tenemos doce y ya somos unos casos perdidos... ya ni atracar podemos. -Sí buey, neta estamos criaturas, pero ps qué quieres puto, esto es de güevos. -Ahí me esperan tantito, voy al baño a lavarme un poco. -También te limpias la guacareada puto.

-Está jodido esto...

martes, 13 de noviembre de 2012

Desmantelan al C-4


Treinta y cinco empleados del Centro de Control y Comando, fueron tocados por el programa de austeridad; ya piensan demandar laboralmente y hasta tienen quien los asesore.

Arturo Tecuatl

Ayer martes celebramos el día mundial para prevenir la diabetes. Mucho tenemos que hacer para impedir que este mal afecte a nuestros organismos y baje terriblemente nuestro nivel de vida, como le pasó al muy estimado titular del Secretariado Estatal de Seguridad Pública (SESPET), Benito Hernández Fernández, quien pese a ser un hombre disciplinado y constante, vio a últimas fechas mermada su salud, al grado de declararse incompetente para seguir al frente de dicha encomienda.

Temporalmente, su lugar fue asumido por una colaboradora suya, al parecer de nombre Irma Ramírez Solano, encargada del despacho y también encargada de activar la tijera laboral.

Treinta y cinco operadores, agentes y otro tipo de empleados del Centro de Control, Comando, Comunicación y Cómputo (C-4) fueron despedidos desde este lunes 12 de noviembre. Esta vez, nos dicen, no hubo de por medio exámenes de control de confianza no aprobados, simplemente pasaron a engrosar las filas del desempleo.

Todos ellos, se supo en el C-4, decidieron acudir con un viejo camarada, el abogado José Juan Temoltzin Durante, para que los asesore en la demanda laboral colectiva que habrían ya iniciado ante este súbito despido sin aparente justificación.


No entiendo esta política destructiva. Se trata de personal especializado, entre otras cosas en atender y operar las emergencias a través del 066; ellos proveen mediante tecnología computacional e infraestructura de comunicaciones a nivel estatal conectada a una red nacional, mecanismos para la coordinación de acciones en materia de seguridad pública de las distintas instancias.


Pero así ocurre en esta administración, donde nadie hace falta y todos, conservan su trabajo, "según amanezca yo de ánimo". Así lo ha señalado el mandatario. Nadie tiene seguro el empleo.

¿Un mandatario que se conduce mediante su estado emocional?

Este lunes, por ejemplo, manifestó: "me duele el corazón, pero mantengo la cabeza fría". Para el martes, su ánimo decayó y de plano regañó a los reporteros cuando lo cuestionaron sobre los problemas de bullying: "eso ya no es noticia", y no detuvo su arrogante andar por más intentos del gremio para realizarle una entrevista.

Así, con ese desdén, este gobierno abrió el enésimo frente. Su ex colaborador José Juan Temoltzin Durante, removido como titular del Secretariado Estatal de Seguridad Pública, cuando se le relacionó con un secuestrador que resultó ser el jefe de la Policía de Chiautempan, ahora afila lanzas, pues ya no está de aquél lado del mostrador.

Aquella fidelidad a González Zarur, quedó como un buen recuerdo. Más o menos como pasó con su entrañable amigo, Rubén Flores Leal, impulsor junto con él, de Hugo René Temoltzin Carreto, el secretario de la Función Pública que, se olvidó de ambos y se ha concentrado en responder a sus propios intereses. Sus inventores se sienten defraudados, traicionados.

Pero Temoltzin Carreto, tiene una opinión distinta. Seguramente tiene la conciencia tranquila para mirar así, por arriba del hombro a ese par que mucho tiene que ver con su surgimiento, pero ya ve, así es la naturaleza humana.

Muchos en el C-4 suponían que al sustraerse Benito por las razones de salud que ya comentamos, la responsabilidad recaería en Sergio Pintor Castillo, quien se desempeñaba como secretario técnico del Consejo Estatal de Seguridad Pública.

Pero el no ser abogado y, aparentemente no haberse titulado como ingeniero, fue el primer obstáculo para asumir la dirección.

Treinta y cinco empleados más echados a la calle. Convertidos en adversarios. En parte de la estadística dibujada por un programa de austeridad que pronto mermará a la burocracia tlaxcalteca con cerca de 40 por ciento de la plantilla original.












lunes, 12 de noviembre de 2012

Allá es la hacienda... aquí el gobierno.

Arturo Tecuatl

Esta bellísima estampa, de hacendado (el catrín de la chaqueta clara), capataz, (el otro catrín) y tlachiqueros, tomada hace muchos años allá por el rumbo de Muñoz, en la falda de la Malinche, nos ilustra la pretendida instauración de régimen piramidal de las haciendas en el Tlaxcala de hoy, donde esas variantes de feudalismo, tuvieron un éxito extraordinario, mientras los pobres reprimieron sus legítimos deseos de aspirar a un patrimonio.

El gobernador, Mariano González Zarur, pertenece a una dinastía de hacendados. Es uno de los pocos propietarios de hatos de ganado bravo, "La Soledad", famosa en el medio taurino por la bravura de sus animales, y también por el temperamento de su dueño.

Poca ha sido la ayuda aportada por dicho temperamento. Tal vez es efectiva en el ámbito de su feudo, donde hace falta un patrón muy diablo para hacer de los negocios la constante que asegure bonanza y del trato rasposo a los peones, la vigencia de la humillación ante el todopoderoso.

En el rancho hay que tener una nómina ligera, hay que mantener constantemente al trabajador con la amenaza de despedirlo. Vieran ustedes qué buen resultado da.

En el rancho no hay derechos laborales; la permanencia depende de tener contento al patrón. Bueno, en esos tiempos retratados tan magistralmente en la foto histórica que le presento, conozco testimonios de familias dispuestas a ofrendar la virginidad de sus hijas con tal de mantener contento al amo.

Qué duro la deben haber pasado muchos paisanos nuestros, alejados de las ciudades, del progreso, y hasta habituados a esa indigna forma de subsistencia.

Entre ese sistema de vida y el ejercicio del poder tras una elección constitucional hay una amplia brecha.

González Zarur, por consecuencia, debe abrir los ojos a la realidad que le ha tocado vivir como autoridad.

Veo que se la ha dificultado establecer los parámetros entre uno y otro ámbitos.

Y a sus colaboradores les da trato de subordinados, así los llama. No reconoce en ellos las capacidades que les permitieron ascender a los puestos estratégicos. En realidad los ve como peones suyos en el gran rancho que por fin ha podido conseguir, apoyado por las siglas de un partido político y el involucramiento de gentes y grupos, gracias a los cuales ha podido realizar su sueño, pospuesto en al menos dos oportunidades.

Colaboradores suyos me han llegado a expresar un raro desencanto porque su patrón dejó hace unos años de tener aquél carácter aún más explosivo y violento que hoy. Para ellos, Mariano llegó veinte o veinticinco años después de su mejor momento.

¿Y ese era un buen momento?, ¿la violencia como tarjeta de presentación?

Un sujeto violento, con poder puede convertirse en una amenaza social.

Es más, hay las evidencia que me permiten lamentar a esa amenaza social como una realidad y no una posibilidad.

En un entorno con protagonistas cada día más preparados, donde la cosa científica ha sustituido a la cosa emocional, personajes como Mariano González, deberían reorientar su espíritu forjado en los corrales de su hacienda.

Es tiempo de prepararse, nunca es tarde.

De envolver su genio en una mente dispuesta y escuchar a las voces que difícilmente se expresan, debido al miedo que le tienen.

Así, su gobierno no podrá aspirar a ser el mejor.

Debe aceptar que hoy, cualquier servidor público, seleccionado al azahar, puede tener un mejor grado académico que él. Por tanto, no es ni se siente inferior. No es un peón. No le ofrendará la virginidad de su hija para que le permita conservar el trabajo. No, hoy Mariano trata con profesionistas, posgraduados muchos de ellos.

La revolución le ha llegado tarde.

Pero aún puede, porque no ha dejado el poder, corregir el rumbo.

Nunca es tarde.

Menos si se trata de reconocer sus valores, sus reales valores a las personas que, espontáneamente lo hay secundado.

Es su última oportunidad.

Con su partido, el PRI, se agrandó la brecha del distanciamiento. En un irreversible proceso, será despojado del poder con esas siglas.

Dicen que es una voluntad superior a él.

¿Quién le queda?

Esos a los que malamente llama subordinados, y los maltrata, y les infunde el miedo de quien no desea aceptarse inferior.

Hacer un alto. Evaluarse. Ser autocrítico es el seguro de vida para posponer su inmolación.

Que triste morir políticamente porque no se fue capaz de contener la ira, la soberbia, adquiridas, le decía, en los corrales de esa bella hacienda, donde retozan los becerros, donde impresionan los sementales bravos.

Allá es la hacienda.

Aquí, es el gobierno.

jueves, 8 de noviembre de 2012

Lindas mujeres se refrescan en el Zahuapan, o ¿en Acuitlapilco?

Cuánta sensualidad de la época en este cuadro lleno de auténtica belleza tlaxcalteca. en apariencia una mamá atraviesa con sus hijas un tramo del Río Zahuapan, o tal vez, refresquen sus pies en las aguas cristalinas de Acuitlapilco. Lo cierto es que la tlaxcalidad impresa en esta imagen es incomparable.

Tlaxcala Antigua, Avenida Juárez esquina con Lardizábal

Avenida Juárez y Lardizábal, como se conoce hoy esta esquina donde se ubica la Secretaría de Turismo del Estado, era entonces la sede del Honorable Congreso del Estado de Tlaxcala. Aquí podemos ver una romería a las afueras de dicha esquina, seguramente tras alguna medida histórica de las autoridades de nuestro estado.

Desfilan jinetes en la Plaza de la Constitución de Tlaxcala

El mismo frondoso e imponente fresno frente al Palacio de Gobierno de Tlaxcala, ahora es testigo del paso de decenas de jinetes, aparentemente de la Caballería del Ejército Mexicano, o de alguna Fuerza de esta arma, de acuerdo con las regiones y las etapas de la Lucha Revolucionaria. Al paso de los de acaballo, marchantas, paisanos, parroquianos y más militares, observan la incomparable estampa en plena Plaza de la Constitución de Tlaxcala.

Desde el Portal Grande, como no lo había visto...


¿Nota la cantidad de publicidad pegada los pilares del Portal Grande? Eran los tiempos del piso de tierra, los tranvías y los días más largos y soleados. 
Protagonista de esta colección es el robusto fresno frente a lo que hoy son las oficinas de la Oficialía Mayor de Gobierno, ¿de cuántos eventos no será testigo?

martes, 6 de noviembre de 2012

El Portal Grande de Tlaxcala con Tranvías y gente de la época

Como podrán ver la Avenida Juárez de Tlaxcala, siempre ha sido muy linda. Claro, antes frente al Portal Grande, uno podía abordar el rápido y eficiente tranvía que, para la época, a veces alcanzaba velocidades de vértigo, hasta de 15 kilómetros por hora. Hoy, en cambio, unos camioncitos disfrazados de tranvías son el atractivo turístico al cual, yo creo que le falta este sabor a plantas y a tierra.

Cuatro jovenazos de la ópoca posan bajo el enorme fresno que ya desde entonces se había acostumbrado a nuestras animadas conversaciones, tal vez de política, o a lo mejor de otros asuntos, pero eso sí, siempre con la elegancia de quienes parecen haber llegado de alguna jornada, seguramente con buenas noticias.

Máquina 2 del Tranvía Mexicano, estampa del Tlaxcala antiguo

Es la Máquina 2 del Tranvía Mexicano, cuyas vías atravesaban la ciudad de Tlaxcala y se dirigían a Santa Ana Chiautempan. Note la gallardía de tripulantes y macheteros, apuestos abuelos o tal vez tatarabuelos nuestros a quienes tocó escribir una de las páginas más románticas de la, "Niña Tlaxcala", como la llamó Miguel N. Lira.


La bella fachada natural del Palacio de Gobierno de Tlaxcala

Seguramente hay miles de historias que narran hechos acontecidos en la Plaza de la Constitución de Tlaxcala, y que tienen como marco al sobrio y espléndido Palacio de Gobierno. Pueden ustedes apreciar la magnífica paz que se respiraba, un poco distinta al ajetreo de hoy, sobre todo cuando hay alguna manifestación.

Noten la perfección de los bloques de xalnene, entonces expuestos en una fachada natural, alternada con remates pétreos, balconería forjada y amplias puertas de madera, por donde asomaban nuestras autoridades de aquellos años cuando la burocracia era escasa y los trámites se realizaban de manera personalizada.

Ah, qué tiempos aquellos, aunque no crean que todo era tan cómodo. A veces, el Zahuapan crecía tanto que sus aguas desbordaban y en no pocas ocasiones llegaron cerquita de aquí, más o menos donde con el tiempo se levantó el nuevo Palacio Legislativo.

El emblemático Puente Rojo, una moderna mole de acero para cruzar seguro el Zahuapan

Hoy es tan habitual cruzar al Río Zahuapan por el Puente Rojo que, no imaginamos lo indispensable y emblemático que era, allá por las épocas en que podía uno bañarse en las -eso sí- bravas aguas de nuestro amado afluente. Bajo la robusta construcción de vigas de acero puede verse a un catrín y a un paisano, el primero, paraguas en mano, parece evaluar la cantidad de agua que venía río arriba, mirando a lo que hoy es la colonia Adolfo López Mateos, mientras el segundo se halla sobre el bordo por el cual se podía cruzar, siempre y cuando no fuese un día lluvioso.

Y sobre la moderna mole de acero un grupo, seguramente de antecesores nuestros, desafía orgulloso el paso del Zahuapan que, en ese entonces no arrastraba las toneladas de basura y contaminantes como hoy acontece.


Tlachiqueros y Hacendados de Tlaxcala cerrando un negocio

Con el tradicional paisaje tlaxcalteca como marco, nueve tlachiqueros, un capataz y un hombre maduro, al parecer de alto rango en una de las haciendas pulqueras de Tlaxcala, se encuentran en un paraje aparentemente evaluando las saturadas pieles de carnero (o cerdo) curtidas, repletas de aguamiel y cargadas por una recua de aguantadores jumentos, todos ellos muy decididos a llegar, para saciar la sed. (de la colección de Imágenes antiguas de Tlaxcala Online)